En la actualidad, las Cámaras de Comercio de las tres provincias aragonesas están realizando un censo para conocer a fondo el músculo del comercio electrónico en la región. El asunto no es baladí ya que no existen datos concretos sobre cuántos ‘e-commerce’ existen actualmente en España más allá de las estimaciones que publica anualmente el INE sobre empresas que tienen presencia en internet. En total, según los primeros recuentos que aún siguen en proceso, las Cámaras han contabilizado más de 700 portales aragoneses que habilitan una pasarela de pago completa a través de la web, de los que aproximadamente unos 250 son negocios con presencia exclusiva en la red. De ellos, unos 450 han sido censados en Zaragoza, 153 en Huesca, y 90 en Teruel, aunque el número va cada día en aumento, según indican los gestores del censo, en especial después de que el pasado 19 de octubre la DGA también resolviera las ayudas para la competitividad de las pymes, que incluye partidas para la creación de nuevos ‘e-commerce’.
Pero todo este auge tiene, cómo no, sus puntos de partida. En el caso de Castelserás, la muestra que sirve de ejemplo para comprender su desarrollo en todo Aragón, el origen se encuentra en la tienda online‘Aceros de Hispania’ de uno de sus vecinos más conocidos, Ricardo Lop, que tras varios años en la red ha conseguido vender cuchillos, espadas y armaduras a cientos de países de todos los continentes. De allí salió la inspiración para varias iniciativas, la última de ellas, la tienda de juguetes online ‘El Arca de Noa’, surgida el pasado verano.
“Como en el pueblo contamos con varios precedentes que te pueden asesorar lo vimos como una buena opción. Es además un empleo que parece propicio para Teruel, donde si no existiera esto muchos de nosotros nos tendríamos que ir del pueblo”, explica David Romero, gerente de la juguetería junto con su mujer que llevan más de ocho años viviendo en Castelserás.
En el conjunto de la comunidad autónoma los precedentes tampoco son pocos. La Asociación de Tiendas Virtuales de Aragón fue pionera en toda España y en la actualidad, debido a su singularidad, aglutina también empresas de otras regiones como Alicante o Navarra. Su trabajo, junto con el de las Cámaras de Comercio y el que lleva también más de una década realizando el Observatorio Aragonés de la Sociedad de Información ha creado cierto “ecosistema de comercio electrónico en todo Aragón”, según señala el responsable de ‘e-commerce’ de la Cámara de Comercio zaragozana, Narciso Samaniego. Un clima que también se ha apuntalado desde la formación, donde la Universidad de Zaragoza lleva once ediciones del Máster de Gestión electrónica de Empresas, referente en todo el país.
Pese a esto, la formación de base sigue siendo una de las lagunas en las que España y Aragón siguen estando atrás en comparación con otros países europeos. “La formación en FP debería acercarse más a internet y explorar un mercado que no ha dejado de crecer y que además es propicio para Aragón al permitir trabajar desde zonas más alejadas”, comenta Samaniego.
Para aproximarse a este objetivo, desde el pasado mes de mayo y todavía en fase inicial la Cámara de Comercio junto con la Asociación de Tiendas Virtuales ha puesto en marcha el primer vivero de empresas exclusivas de ‘e-commerce’ en Plaza. Un espacio que en la actualidad ocupan tres empresas y que tiene proyección para alojar unas seis más de forma rotatoria.
“La función es distribuir entre varias empresas lo que más inversión supone para un comercio electrónico, la logística y los almacenes”, explican desde la asociación.
De pymes consolidadas a proyectos en busca de autoempleo
Aunque a lo largo de estos años en Aragón se han formado empresas importantes dedicadas al comercio online como Central de Reservas,SoloPorteros, dedicada a los artículos de fútbol, Cestalia, de cestas de Navidad, Funidelia, referente en venta de disfraces, o Barrabés,pionera en poner a solo un click equipamiento de montaña, la radiografía del comercio electrónico sigue basculando entre dos tendencias muy fuertes que también ocurre en la mayor parte del sector TIC.
“Hay una buena parte de startups consolidadas que emplean a tres o cuatro personas, a menudos sus fundadores, y también un grupo de pymes y empresas ya de corte medio que ocupan a bastantes personas para tratarse de un negocio que no es físico, pero también es cierto que hay muchos proyectos que se quedan en nada poco después de abrirse. Hay que tener en cuenta que el ‘e-commerce’ abre la opción de vender a todo el mundo, pero también tienes una competencia mundial”, señala Samaniego.
(Heraldo de Aragón)